¿Entradas serias? ¿Sí? ¿No?

No suelo ser una persona que suela ponerse seria en las conversaciones con los demás. Suelo ver, oír y callar; por desconocimiento, por no tener una opinión formada o, precisamente, por tenerla y no ser la misma que la de mi interlocutor. No me gusta "discutir" porque sí, y hay temas que invitan a ello...

Por eso mismo, no sé si publicar historias en mi blog sobre temas "serios". Primero, porque podrían ser toda una sorpresa para mi abundante público.

"¿Cómo? ¿Una historia sesuda? ¿Sin chiste fácil? ¿Sin enseñar tetas metafóricas para ganarse al público? ¿Han cambiado al guionista sin avisar o qué?"

Segundo, porque podría provocar que mi público se fuera.

"Qué se ha creído este... mira que dejarme sin mi sonrisa de los lunes... ¡¡que le den, caballero, me voy a otro sitio a ver tetas metafóricas!!"

Tercero, porque para mí internet es, la mayoría de las veces, un juguete. Un juego en el que paso bastantes horas al día, como distracción (ya que cuando acudo como fuente de información no suelo pasarme horas: voy, busco, encuentro y salgo). Y hay temáticas, y conversaciones, que creo que no deberían sacarse fuera de su ambiente (un bar, una cafetería, y amigos). Empezar a hablar de la secuenciación del genoma humano es un tema adecuado para tratar con los compañeros de trabajo en la cafetería de la facultad; pero no creo que deba tratarlo aquí. Hablar sobre cuál deber de ser el punto justo de agresividad en una clase de karate entre personas adultas es adecuado hacerlo en la ducha, después de clase, pero no aquí.


Son temas serios, que requieren un enfoque serio.

Y me da reparo que lo que yo escriba sirva para que cualquier "iluminado" de internet, aprovechando el anonimato de la red, se aproveche para generar unas "flame wars".

Aunque tal vez es sencillamente que no me apetece ponerme serio con mi juguete; si estoy hablando de mi colección de transformers, tal vez no quiera hablar sobre los métodos de producción de las fábricas chinas de dónde salen estos. Como ya he dicho, para mí internet es (sobre todo) un lugar de diversión, dónde puedo encontrar foros sobre multitud de temas, cómics, opiniones, imágenes graciosas, etc. No me meto en internet para pensar; es mi equivalente a encender la tele y tragarme el primer programa que den...

¿Y a cuento de qué viene esto, os preguntaréis? Pues viene a que últimamente, las entradas que me apetece escribir, para las que tengo las ideas, son sobre temas serios. Sobre temas de los que entiendo, de los que tengo una opinión clara y formada. Temas de los que no suele importarme demasiado hablar en directo, si me preguntan o sale el tema. Temas, en definitiva, que son tan parte de mí como pueden serlo los temas de miniaturas o cómics.

Y dado que este blog lo uso, sobre todo, para expresarme, me siento un poco "mal" por coartarme yo mismo y no permitirme el expresarme en libertad. Pero me da "pereza" exponer temas que pueden dar lugar a discusiones; eso haría que no fuera divertido...

Con lo qué no sé que hacer. ¿Escribo sobre lo que me apetece? La gente con la que he comentado esto me han dicho que por qué no, que no tiene por qué pasar nada. Cierto, pero... poca gente me ha visto serio. O enfadado, llegado el caso. Y si escribo sobre esa otra parte de mí, tal vez me estaría abriendo a desconocidos más de lo que me gustaría... ^_^U